Uno de los sueños más recurrentes entre los amantes del BDSM es tener en su propia casa un espacio en el que disfrutar de sus juegos favoritos. Una mazmorra perfectamente equipada sería para todos ellos el paraíso soñado. Pero, sinceramente, no es sencillo disponer de espacio suficiente en un piso normal para gozar de una mazmorra BDSM con su potro de tortura, su jaula, su cruz de San Andrés y todos esos complementos ambientales que dan tanto estilismo a un lugar destinado a este tipo de juegos.

Pero que no sea sencillo disponer de un espacio de estas características no quiere decir que debamos renunciar a la posibilidad de tener en nuestro hogar un rinconcito en el que disfrutar del sexo alternativo, el Bondage, la D/s o el sadomaso. Una habitación roja no es tan difícil de conseguir.

En este artículo vamos a darte una serie de ideas para convertir un dormitorio en un lugar un poco más picante. Si quieres saber cómo ambientar un espacio de tu casa para hacerlo apto para la práctica del BDSM y convertirla en una habitación roja, toma nota de lo que vamos a explicarte a continuación.

Mazmorra

Habitación de puticlub

Una buena forma de tomar ideas sobre cómo decorar y equipar un cuarto rojo o una pequeña mazmorra para BDSM es visitar un puticlub que oferte a sus clientes habitaciones temáticas. Dejarse caer de tanto en tanto por un burdel no solo sirve para pasarlo bien disfrutando de la compañía y de los exclusivos servicios eróticos de las chicas que trabajan en él. También sirve para aprender decoración.

Hay prostíbulos que tienen habitaciones especialmente diseñadas para satisfacer las necesidades de los amantes del sexo kinky o para inspirarles cuando, dentro de ellas, se entreguen a sus juegos y se abandonen a su pasión. Si quieres conseguir tu propio rincón kinky, ése es el tipo de puticlub que debes visitar.

En él encontrarás espacios que incitan a la sensualidad y a disfrutar del sexo. Una iluminación sugerente, un perfume que embriague sin atufar, una cuidada selección de accesorios, complementos y juguetes sexuales BDSM… todo medido al milímetro para crear el mejor ambiente y proveer a Amo y a sumisa, a Dominatrix y a esclavo, de todo lo que necesiten para escenificar las fantasías y los juegos de rol que su imaginación haya sido capaz de elaborar.

En la habitación roja de un burdel de este tipo puede encontrarse desde la cama más exclusiva y sensual, hasta una amplia variedad de productos y juguetes eróticos tanto para la práctica del sexo vainilla (preservativos, geles, lubricantes, estimuladores, masturbadores, dildos…) hasta sextoys diseñados y fabricados específicamente para los juegos bedesemeros (esposas, látigos, palas de spanking, cera, instrumentos para el medical play…).

Algunas de estas habitaciones de puticlub para BDSM poseen también anclajes para poder practicar juegos de suspensión. Este tipo de juegos, propios del Bondage, deben ser realizados con sumo cuidado y extremando al máximo las precauciones. Los burdeles y agencias de escorts que ofrecen habitaciones de este tipo a sus clientes ofrecen todas las garantías de seguridad en sus anclajes.

Finalmente, estas habitaciones acostumbran a estar equipadas también con muebles especialmente diseñados para este tipo de prácticas. Algunas incorporan un pequeño potro. Otras, alguna cruz de San Andrés. Con ese mobiliriario y con el color ideal en las paredes, un cuarto de puticlub se convierte como por arte de magia en una magnífica mazmorra sexual.

Habitación BDSM

De habitación a mazmorra BDSM

Visitado el prostíbulo y tomadas las notas pertinentes, ha llegado el momento de convertir tu dormitorio o alguna estancia de tu casa en una mazmorra sexual para la práctica del BDSM o, lo que es lo mismo, para disfrutar de un espacio picante en el que gozar del fetichismo, el Bondage, la Dominación y el sadomaso. En definitiva: de todo lo que cabe en ese saco sin fondo que son las siglas BDSM.

Para conseguirlo hay que deshacerse en ese espacio de todo lo que no reclame ni incite al sexo. Se puede añadir, por ejemplo, un entoldado sobre la cama. Se pueden poner cortinas de terciopelo con un color que incite a la sexualidad. Se puede colocar anclajes en las paredes para poder atar al sumiso o sumisa. ¿No crees que el resultado de todas estas incorporaciones será una habitación mucho más atrevida y mucho más excitante?

Para dar ese toque picante que exige una habitación BDSM es necesario dar a las paredes el color adecuado. El mejor, sin lugar a dudas, es el rojo. Rojo pasión. Rojo deseo. Rojo infierno. Un dormitorio de color rojo está exigiendo que en él se desarrollen las escenas más hot que una pareja de amantes del sexo no convencional puedan imaginar.

Insonorizar el cuarto en el que se van a desarrollar las sesiones BDSM es otra de las medidas que debe tomar quien desea transformar su habitación en una mazmorra. No es cuestión de que los vecinos sepan a qué dedicamos nuestro tiempo íntimo.

También es importante elegir un tipo de suelo adecuado para los juegos que van a desarrollarse en ese cuarto. En ellos es habitual verter algún que otro fluido corporal. Hay que buscar un tipo de suelo, pues, que pueda desinfectarse y limpiarse de una forma sencilla. Los suelos de azulejo, el vinilo o, incluso, la madera, son materiales que pueden funcionar muy bien en este tipo de espacio. Las alfombras, aunque permiten tener algo suave bajo los pies, no son muy recomendables por cuestiones de higiene.

Tras pintar las paredes, insonorizar el cuarto y escoger un suelo adecuado para la práctica bedesemera, ¿qué necesita un dormitorio para convertirse en una mini-mazmorra sexual? Sin duda, una bien equipada caja de juguetes BDSM en la que guardar la pala de azotar, el látigo, la mordaza, las cuerdas Bondage, el espéculo, la jaula para el pene…

¿Cómo debe ser esa caja? Nosotros te diremos que cualquier caja puede servirte, pero que pocas de ellas resultan tan llamativas como lo hace un baúl.

Si deseas incorporar un baúl a tu habitación roja, búscalo en cualquier mercadillo y píntalo de rojo escarlata o de negro brillante. Si no lo encontraras, busca una caja de cartón rígido con tapas y fórrala de terciopelo suave.

Ambas, tanto la del arcón como la de la caja forrada, serían ideas muy adecuadas para crear ese depósito en el que guardar los complementos, juguetes y utensilios que vas a utilizar para practicar tus juegos más deseados.

Mazmorra sexual