Anastimafilia o el deseo de la gordura
Que ser impreciso no es deseable ya lo sabemos. Basta con que cantemos aquello de “ellos las prefieren muy, muy gordas, gordas, gordas, supergordas…” para darnos cuenta de hasta qué puntos puede ser imprecisa la utilización del “ellos”. ¿Que quiénes son los anastimáfilos? Aquellos que gozan con la gordura de su pareja, las personas que tienen la filia o fetiche sexual que conocemos con el nombre de anastimafilia.
Penitencias variadas para aplicar en la relación D/s
Recientemente hemos dedicado algún que otro artículo a las diferentes penitencias que se pueden aplicar dentro de las relaciones D/s. Hemos hablado de las penitencias de escritura y de las penitencias posicionales. En este post vamos a recoger algunas penitencias variadas que pueden servir para conseguir que la parte sumisa no se desvíe del acatamiento de la disciplina que, en todo caso, es la base sobre la que se sostiene la relación D/s.
La humillación erótica en el BDSM
El BDSM no puede ser entendido sin la existencia de la humillación erótica. Cuando hablamos de humillación erótica lo estamos haciendo del ejercicio de la humillación psicológica dentro de un contexto sexual. ¿Quiere eso decir que la humillación erótica debe ser, ineludiblemente, una humillación de carácter sexual? No. O no, al menos, necesariamente. Conoce mejor los fundamentos teóricos de la humillación erótica dentro de las prácticas BDSM.
Penitencias posicionales en el BDSM
Ya lo indicamos en este blog cuando hablamos de las penitencias de escritura en el BDSM: toda relación D/s exige, tarde o temprano, la imposición de una penitencia. Sin castigo no existe BDSM pero el castigo debe ser, siempre, proporcional y adecuado. Entre las opciones que la parte Dominante tiene a la hora de escoger una penitencia para castigar a su sub existen las que se conocen como penitencias posicionales.
Efebofilia: un fetichismo cronofílico
Imposible olvidar un arranque de novela como éste. Es el inicio de la novela Lolita, del autor de origen ruso nacionalizado estadounidense Vladimir Nabokov. En ella, Nabokov cuenta la historia de Humbert Humbert, profesor de literatura francesa y que tiene una obsesión sexual: las muchachas pubescentes, es decir, que aquéllas que se encuentran en el inicio de la adolescencia o, dicho de otro modo, de la pubertad.
El sado: placer más allá de los genitales
Son muchas, sin duda, las prácticas que pueden llevarse a término mientras escenificamos una escena sado. Unas más espectaculares, otras menos, todas ellas están llamadas a cumplir una función dentro del universo del sado. Algunas de ellas, además, resaltan algo característico del sado y que es lo que queremos recalcar en el artículo de hoy. Ese algo es que las prácticas sadomasoquistas convierten a todo el cuerpo en lugar posible de experimentación del placer.
Castigos inmediatos y castigos formales en el BDSM
Los castigos que puede aplicar la parte Dominante pueden clasificarse de múltiples maneras. En este artículo vamos a realizar una clasificación en la que se distinguen dos grandes grupos de castigos diferenciados entre sí por el momento en que se aplican. Los primeros, los llamados castigos inmediatos, son aquéllos que se aplican en el mismo momento en que se comete la falta que debe ser castigada. Los segundos, los denominados castigos formales, son aquéllas que se posponen a una determinada fecha.
Las endorfinas en el BDSM
Entre las actividades que suelen servir para aumentar los niveles de endorfinas encontramos actividades tan variadas como recibir un masaje, tomar el sol, comer chocolate, meditar, cantar o, lo que a nosotros, en esta sección, más nos interesa, practicar BDSM. La parte sumisa experimenta subidones puntuales de endorfina durante todo ejercicio BDSM. La parte Dominante debe saber cómo provocar que el cuerpo de la persona sumisa experimente dichas descargas. Y debe saber graduarlas y modularlas.
¿Qué es y qué no es el BDSM?
Uno de los términos que más popularidad ha ganado en los últimos años es el término BDSM. En buena parte, dicha popularidad se debe a lo que podríamos llamar el “fenómeno Grey”. Todo el mundo habla ahora del BDSM y todo el mundo se permite el opinar sobre él. Y eso, como dijimos anteriormente, implica que no siempre se hable con propiedad cuando se habla de BDSM. Vamos a intentar aclarar aquí lo que es y lo que no es BDSM.
Fetichismo de la sangre menstrual
Dos palabras para hablar de lo mismo: menstruofilia o menofilia. Es decir: fetichismo por la sangre menstrual o fetichismo por la regla. Y es que, aunque a quien no comparte este fetichismo puede parecerle sorprendente, hay hombres y mujeres a quienes les gusta el olor, el sabor y la consistencia de la sangre menstrual. Maanee Chrystal, psicopedagoga holística, incluso llega a recomendar a las mujeres, por motivos que nada tienen que ver con el fetichismo, la ingesta de su propia sangre menstrual.
Penitencias de escritura en el BDSM
Toda relación D/s lo exige. Tarde o temprano se debe imponer una penitencia. Son inimaginables los juegos BDSM sin las penitencias o castigos. En este post vamos a recoger diversos tipos de penitencia que, en un momento dado, pueden servir a la parte Dominante de una relación D/s para imponer algún tipo de castigo a su sub y que tienen que ver, de una forma u otra, con la escritura.