Los anillos para el pene

Los anillos para el pene son anillos propiamente dichos o correas que se ajustan alrededor de la base de la polla, junto a las pelotas. Estos instrumentos puedes estar hecho de muchos materiales diferentes. Entre estos materiales podemos encontrar el cuero, el caucho o incluso el metal. Su forma puede ser también la de un anillo continuo o la de una correa ajustable que pueda sujetarse y fijarse con algún tipo de dispositivo que lo permita. La colocación de un anillo de pene ayuda a mantener la polla llena de sangre, más voluminosa y con una erección mucho más potente y duradera.

Si tienes que escoger un anillo para tu polla, piensa en todo momento que el tamaño es importante. El de tu pene, por supuesto; pero el del dispositivo que compres también. Las marcas más acreditadas recomiendan que midas la circunferencia de la base de tu pene cuando éste se encuentre erecto y a la altura aproximada a la que colocarás el anillo. La cifra obtenida debe dividirse por 3,1 y el resultado de dicha operación será el número de referencia de un diámetro de anillo adecuado para tu polla. En caso de duda, siempre es preferible que, entre dos tamaños, elijas aquél que sea un poco más holgado. Demasiado apretado puede ocasionar problemas.

Los anillos para el pene pueden ser difíciles de quitar a veces. Eso suele suceder cuando el pene sigue erecto (los hay peleones) o cuando los testículos, por una causa o por otra, se inflaman. Esto es particularmente cierto cuando hablamos de anillos de una sola pieza, no ajustables y, en especial, de metal. La ventaja de los anillos de caucho, cuero o telaes que, en un momento dado, puede echarse mano de unas tijeras para, con sumo cuidado, cortarlos. Cualquier modelo ajustable puede, lógicamente, hacerse más grande en caso de emergencia. Eso bastaría para permitir la extracción del anillo de pene. Si por cualquier motivo se atascan no hay que ponerse nervioso. Seguro que todo tiene una solución más o menos fácil. Y es que la erección no durará siempre, ¿no?

anillo para pene

Vendajes elásticos

Los vendajes elásticos, al igual que las vendas, son dispositivos de muy fácil uso y muy adecuados para constreñir tanto el pene como los testículos. También tienen la ventaja de ser fácilmente adquiribles, por lo que siempre pueden estar al alcance de la mano.

Los juguetes eléctricos

Hay una floreciente industria de diseño y fabricación de juguetes e instrumentos para el sado y el BDSM que ha ideado una serie de mecanismos que permiten la estimulación eléctrica trans-cutánea. Estos dispositivos, que reciben diferentes nombres dependiendo del fabricante, permiten la modificación de la corriente eléctrica para que puedan ser conectados a estimuladores eléctricos sobre la piel. Con ellos conseguirás producir sensaciones físicas muy particulares gracias al uso de una corriente de baja intensidad pero alto voltaje. Los diferentes impulsos de carga eléctrica hará que los músculos se contraigan y eso, usado del modo conveniente, con información y preparación suficiente, puede resultar estimulantemente placentero para el amante de estos juegos.

Estos dispositivos no acostumbran a ser baratos, pero tratándose de la electricidad, siempre es preferible invertir un poco más para, así, garantizar una seguridad imprescindible para que el juego pueda desarrollarse sin sobresaltos. Con un equipo adecuado y una utilización óptima, la próstata puede ser maravillosamente estimulada. La sensación de padecer un hormigueo levemente doloroso puede ser comparable a la de un orgasmo continuo. Todo ello, claro, dependerá de la intensidad de la estimulación y de la tolerancia de cada persona a ese tipo de sensaciones.

Estos dispositivos deben ser personales e intransferibles. No pueden compartirse ya que son difíciles de esterilizar y pueden convertirse en potenciales transmisores de enfermedades.
Una de las últimas innovaciones eléctricas consiste en unas capas de Plexiglás recubiertas de cinta conductora. Estas capas se colocan sobre pene y testículos proporcionando así a ambos las sensaciones deseadas en cada momento.

Hay otro innovador sistema eléctrico que, ¡sorpréndete!, viene directamente de la tienda de mascotas. Son una especie de collares fabricados para ser utilizados en el adiestramiento de perros. Este dispositivo funciona de manera similar a una picana en miniatura, con la salvedad de que puede ser activado mediante una batería de control remoto. Cuando este dispositivo está amarrado a tu polla y a tus huevos, con los puntos de contacto situados sobre el escroto, puede resultar muy eficaz.

Con todos estos dispositivos eléctricos hay que tener en cuenta una cosa: no todas las personas tienen el umbral del dolor colocado en el mismo nivel. Lo que para una persona puede resultar placentero para otras puede ser extremadamente doloroso.

Cremas y linimentos

Muchos de los ungüentos y linimentos que se utilizan para aliviar dolores musculares son utilizados también para producir distintas sensaciones en la piel del pene y los testículos. Hay, principalmente, dos tipos. Los refrescantes y los creados para producir calor. Entre los primeros encontramos los mentolados o alcanforados. Los segundos acostumbran a tener canela, mostaza, capsaicina o algún tipo de combinación.

Estos aceites pueden irritar la piel, pero el motivo de su uso es muy sencillo: estimulan la circulación y esa estimulación produce una sensación calorífica que puede resultar muy agradable.

Antes de usar un producto de este tipo sobre partes tan preciadas de tu anatomía, asegúrate de que su uso sobre las mismas es seguro. La capsaicina (especialmente en cremas) puede causar quemaduras químicas. Por eso hay que tener cuidado al usarla y, sobre todo, no tocar nunca los ojos si creemos que hay rastro del producto en nuestros dedos. Usar guantes de látex mientras se aplica la crema y, a continuación, quitárselos, es una sencilla y, al tiempo, gran medida de precaución a tomar. Evita accidentes innecesarios.

Debido a que estos compuestos están basados en el petróleo son difíciles de lavar. Por eso no es fácil detener una escena. Ni siquiera el agua y el uso abundante de jabón normal y corriente garantizan una limpieza exhaustiva del producto.

Evita siempre que esos productos toquen la uretra, el recto o cualquier membrana mucosa. Como te hemos dicho, estos productos pueden llegar a causar quemaduras, especialmente si hay algún daño en los tejidos a los que se aplica (hemorroides, fisuras, cortes).

Una alternativa soluble en agua, aunque no es buen lubricante, es la pasta de dientes. Proporciona un agradable cosquilleo y, al ser mentolada, resulta refrescante. Además, se lava y enjuaga muy fácilmente.