Un instrumento para fetiche médico

Dentro de los juegos BDSM siempre ha tenido un protagonismo especial lo que se conoce con las siglas FPSM (fetish perversión sadism masochism), es decir, todos aquellos juegos en los que, de una manera u otra, algunas prácticas médicas adquieren un protagonismo fundamental. En este blog ya hemos hablado en alguna ocasión del fetichismo médico y de cómo éste incorpora prácticas que pueden ir desde el afeitado corporal parcial o integral previo a una hipotética intervención quirúrgica hasta el uso de enemas, extractores de leche, vendas o espéculos.

A este último instrumento, al espéculo, vamos a dedicar el artículo de hoy. Dentro del instrumental médico, el espéculo es uno de los más antiguos. Griegos, romanos y árabes ya poseían espéculos tal y como lo demuestran algunos hallazgos arqueológicos y algunos libros antiguos. En la actualidad, y pese a haber perdido parte de su protagonismo debido a la aparición de los endoscopios, el espéculo aún puede contemplarse en las consultas ginecológicas. En ellas, el espéculo cumple una función fundamental a la hora de abrir y estirar los genitales. Esa función, tan llamativa y con tantas connotaciones sexuales y de tortura, convierten al espéculo en un instrumento que no puede faltar en una mazmorra o en una sala destinada al juego sado.

Los espéculos vaginales pueden ser de plástico o metal y están formados por dos hojas y un mango. Las dos hojas del espéculo tienen forma de pico de pato y, al introducirse dentro de la vagina, pueden separarse para, así, permitir una buena visión del interior de la misma.

El uso del espéculo

Para utilizar el espéculo en nuestros juegos (bien sean juegos S/M, bien sean juegos de rol médicos), puede resultar muy interesante el poseer una mesa ginecológica que permita a la mujer sumisa/esclava adoptar la postura adecuada. Para usar el espéculo hay que contar también con unos guantes de látex y algún tipo de gel lubricante que permita lubricar el espéculo para que pueda introducirse donde deba hacerlo sin causar fricciones innecesarias e incómodas.

A la hora de utilizar el espéculo hay que tener en cuenta que resulta conveniente vaciar previamente la vejiga. Si no se hace, puede ser que ésta se vacíe, de improviso, durante el juego S/M. Posiblemente ésta sea una posibilidad muy valorada entre algunos jugadores.

Una buena iluminación debe ayudar a la introducción del espéculo. Antes de hacerlo, debemos conocer la orientación de la vagina, así como su longitud y anchura. Esto nos permitirá elegir el espéculo más adecuado e introducirlo de la manera más correcta. Para conocer cómo es la vagina, nada mejor que proceder al tacto de la misma. Separar los labios menores e introducir un dedo lubricado dentro de ella es la mejor manera de adquirir esos conocimientos que nos permitirán introducir en ella el espéculo sin causar daños. Para ello, es fundamental que la presión del espéculo se ejerza sobre la pared posterior de la vagina. Todo lo que sea presionar en la parte anterior supone, de alguna manera, presionar sobre la zona cercana a la uretra, zona más sensible y delicada.

Para introducir el espéculo debe introducirse de manera oblicua y, una vez dentro de la vagina, girarlo para colocarlo en posición horizontal. Una vez colocado así, y teniendo cuidado de no pellizcar los labios menores, hay que abrir las hojas del espéculo. Eso se hará cuando éste haya llegado al fondo de la vagina para, así, contemplar claramente el cuello uterino. Una vez éste se pueda contemplar, el espéculo debe quedar fijado.

El espéculo puede ser utilizado, también, analmente. En este caso hay que tener en cuenta que debe haber existido una penetración previa que haya servido para habituar a la zona y para evitar el desgarro de los anillos anales. Después de todo, el espéculo, al abrirse, tendrá un efecto similar al del fisting anal. La lubricación y estimulación anal serán fundamentales a la hora de utilizar el espéculo anal. La utilización de un enema previo puede servir, también, para limpiar la zona, higienizarla, vaciarla de heces y, así, evitar la posibilidad de un accidente que convierta el juego con el espéculo en una práctica scat.

La limpieza del espéculo es fundamental para evitar infecciones. Para mantener una higiene adecuada del mismo deberá ser hervido después de cada uso y guardado en un lugar limpio y seco y, a ser posible, dentro de una bolsa que pueda cerrarse y que impida el contacto de cualquier tipo de polvo o suciedad con el espéculo.