La elección del animal es determinante cuando se va a participar en un juego de rol del animal humano en el que se va adoptar un papel de animal humano. Para determinar el tipo de animal humano y, con ello, marcar los derroteros por los que puede avanzar el juego de rol, debes elegir la especie, la personalidad y el modo de interactuar que dicho animal tendrá con su entorno. Eligiendo esos tres aspectos, ya tendrás configurado tu yo animal para tu juego de rol.

Especies animales para el juego de rol del animal humano

El animal humano que elijas para participar en el juego puede ser grande o pequeño. Hay muchas personas a las que les atrae actuar como ponys. Estas personas se sienten atraídas por todas las posibilidades que la figura del pony o el caballo les ofrecen para el juego de rol. Las características de los equinos (fuerza, elegancia, belleza, gracia, poder, equilibrio o confianza) pueden atraer a un tipo determinado de personas. Tirar de un carro, actuar como semental, ser un potro salvaje o comportarse de manera juguetona como un animal joven pueden ser algunas de las opciones que la figura del caballo aporte al juego de rol del animal humano.

La especie más común en los juegos de rol en los que el hombre actúa como animal es, sin embargo, la canina. Perros, cachorros y lobos son tres de las opciones más elegidas. El cachorro humano adquiere una nueva perspectiva. Lo ve todo entre las piernas de los hombres. Gatea juguetón entre ellos, responde a sus caricias, se muestra devoto y lúdico al mismo tiempo. También puede mostrar un perfil más agresivo si el tipo de perro escogido es un rottweiler.

La felina es otra de las especies más escogidas para protagonizar los juegos de rol en los que el hombre desea sentirse animal. Desde gatitos a leones, pasando por leopardos o tigres, son muchas las posibilidades que se ofrecen.

Los animales de granja aparecen también frecuentemente en los juegos de rol eróticos. Mucho menos comunes son los insectos, los reptiles y las aves, aunque también pueden crearse juegos de rol de animales humanos alrededor de ellos. Al fin y al cabo, todo depende, finalmente, de la imaginación. Y la imaginación puede llevarnos, siempre, por derroteros desconocidos.

Personalidad

Una vez que hayas elegido el tipo de especie con la que quieres jugar, debes escoger una personalidad para tu mascota. No hay una personalidad que sea mejor que otra para prestarse al juego y a la escenificación de los roles. Eso sí: antes de iniciarse el juego de rol del animal humano debe escogerse la personalidad y atenerse a ella durante él. ¿Quieres una mascota perezosa? ¿Quieres que sea salvaje? Escoge y actúa en consecuencia.

Si no estás seguro de con qué personalidad quieres adornar a tu animal, piensa en algunos nombres. Los nombres pueden ser muy indicativos de la personalidad. Pueden darnos muchas claves para saber cómo interactuar con la mascota. Por otro lado, ser llamados por ese nombre nos coloca fuera de nuestro yo y nuestro día a día, cumpliendo, así, uno de los objetivos del juego: el permitirnos desconectar de lo que día a día somos y hacemos. Una irónica combinación de nombre y especie puede resultar muy divertida. Por ejemplo, ¿cómo suena llamar Pinky a un chihuahua? ¿Y a un pit bull?

Interacciones

Cuando conozcas qué motivo te empuja al juego de rol del animal humano y hayas elegido la especie y la personalidad del animal humano, habrá llegado el momento de elegir con qué personajes vas a interactuar. ¿Querrás ser una mascota que va por libre, jugando con sus juguetes y comiendo en su comedero? ¿Querrás ser un perro y que tu compañera sea una perra para, así, abrir la posibilidad de un juego erótico inequívoco? ¿O preferirás ser, por ejemplo, un gato, y que ella sea un perro? ¿Y si es un ratón? Quizás tengas ganas de pasar un tiempo divertido jugando a Tom y Jerry.

Puede ser que lo que prefieras no sea interactuar con otro animal, sino que elijas hacerlo con un ser humano. ¿Quieres ser la mascota de un propietario que está orgulloso de su mascota y que la cuida y la mima, cepillándole el pelo y sacándola de paseo?

Puede ser, también, que prefieras ser una mascota que tiene que ser instruida. Quizás te guste eso: que un instructor te enseñe a comportarte. Si te gustan los juegos de dominio y sumisión, este tipo de juego de rol del animal humano puede ser muy apropiado para ti.