fetichismo
Fetichismos de los nuevos tiempos
Al igual que cada nuevo tiempo y cada cultura posee sus propios cánones de belleza, cada época y cada rincón del planeta posee elementos que adquieren una especial relevancia fetichista. Si tuviéramos que buscar fetichismos propios de nuestro tiempo o, cuanto menos, detalles que hacen que una mujer pueda volverse irresistible para un buen número de coetáneos, ¿qué elementos y tipos de ropaje seleccionaríamos?
El nyotaimori o sushi corporal
Cercana a la fornifilia podemos encontrar una práctica con claras connotaciones fetichistas en la que el cuerpo femenino queda, también, absolutamente cosificado. Esa práctica de la que hablamos se conoce con el nombre de nyotaimori o sushi corporal y consiste en convertir el cuerpo de la mujer (si fuera el del hombre hablaríamos de nantaimori) en una especie de bandeja sobre la que servir el sushi o el sashimi que se va a comer en una reunión. Estos alimentos deberán ser comidos sobre la piel desnuda de la persona.
Diverse: una fiesta para gozar de la diversidad sexual
Mañana es el día. Sábado, 4 de junio. Ésta es la fecha seleccionada por “Golfxs con principios” para celebrar el Diverse, un evento que pretende convertirse en algo mensual y que debe servir de punto de encuentro para gente de ambientes muy distintos y que tenga toda la gama posible de expresiones de la propia sexualidad.
Elmer Batters o el fetichismo fotográfico de los pies
Si hay alguien que ha elevado la plasmación del fetichismo de los pies y las piernas a la categoría de arte ése es el fotógrafo estadounidense Elmer Batters. Al dejar tras de sí una excelente obra fotográfica en la que pies, piernas y panties se convertían en contenido principal de la misma, Elmer Batters unía su nombre al de otros insignes fotógrafos que, de una manera u otra, han convertido el fetichismo en la temática principal de su obra.
Las bragas usadas, objeto de consumo
El fetichismo por la ropa interior usada (Used Panties Fetish) no es nuevo. De hecho, es difícil encontrar un fetichismo nuevo. Sólo aquéllos que tengan que ver con determinadas tecnologías puede ser entendidos como nuevos y, aún así, seguro que hincan sus raíces en alguna tradición más o menos antigua. En los últimos tiempos, el fetichismo de la ropa interior usada ha experimentado una notable implantación. A ello ha ayudado, sin duda, la expansión de internet. Conseguir una prenda interior usada ya no es ahora una tarea de riesgo como podía serlo años atrás.
Uso de enemas en los juegos BDSM
El fetichismo médico siempre ha tenido un glamour especial. En cierto modo, no es necesario ser especialmente fetichista para practicar un juego de rol en que doctores, doctoras, pacientes, enfermeros y enfermeras se enzarzan en todo tipo de prácticas que pueden ir desde la simple y casi infantil revisión médica hasta prácticas más agresivas como pueden ser la puesta de inyecciones, la colocación de aparatosos vendajes, el uso de algún tipo de espéculo o la utilización de enemas, es decir, la introducción de un líquido por vía rectal.
Alva Bernadine, fotógrafo de la forniphilia
De entre los fotógrafos que han centrado parte de su obra en la plasmación de algún tipo de fetichismo, Alva Bernadine es uno de los más llamativos y originales. Su estética surrealista y su modo de utilizar el cuerpo femenino lo convierten en un fotógrafo fácilmente reconocible dentro del universo de la fotografía erótica. Especialmente interesante resulta su serie fotográfica dedicada a la fornophilia, ese fetichismo tan original como visualmente impactante y que consiste en convertir a la pareja en una especie de mueble.
La fotografía fetichista de Jonathan Leder
Una de las características fundamentales del fetichismo es, sin duda, su componente visual. En todo fetichismo existe un componente visual muy marcado y eso lo convierte en objetivo preferente de las cámaras fotográficas. Son muchos los fotógrafos que, en un momento determinado de su carrera, han prestado atención a la temática fetichista y se han decidido a realizar fotografía fetichista. Entre esos fotógrafos se encuentra Jonathan Leder.
El fetiche de los pies de loto
Hay fetichismos que están ligados de manera indisoluble a una determinada cultura y a un tiempo muy específico. El fetichismo de los pies de loto es uno de ellos. Se dice que es debido a una leyenda sobre un emperador chino y una de sus cortesanas. Durante muchos siglos, este fetichismo eminentemente cultural supuso para muchas niñas el tener que pasar por un doloroso proceso de modificación de la estructura ósea de sus pies para que éstos adquirieran las características del deseado pie de loto.
Fetichismo de la lactancia erótica
Dentro de los fetichistas del pecho hay unos fetichistas especiales: los que lo son del acto en sí de la lactancia. En el caso de estos fetichistas, el acto del amamantamiento se convierte en parte central de su sexualidad. Mamar los pechos de su pareja es el sueño principal de todo fetichista de la lactancia erótica y es, también, una práctica que puede darse entre practicantes de juegos BDSM no necesariamente fetichistas.
El fetichismo del pelo
Al deseo, al igual que al fuego, hay que añadirle combustibles que nutran su lumbre. En ocasiones sirve a tal fin un juguete erótico. Estaría bien saber con exactitud cuántas parejas han recuperado parte de la fogosidad de los inicios de su relación gracias a la introducción en sus prácticas sexuales de, por ejemplo, un dildo, un anillo para el pene o un plug anal. La introducción de un fetiche en la relación de pareja puede ser, también, una buena manera de evitar que el fuego de la pasión de la misma empiece a apagarse.