cuerdas
Nudo de Bondage “El arnés de los amantes”
“El arnés de los Amantes” es una atadura bondage que hace referencia directamente a un nudo que, en el centro del pecho, sujeta esa zona en que palpita el corazón de los amantes. Pese a la dulzura del nombre, no te dejes engañar: este tipo de atadura bondage da a la mujer que la luce una apariencia de guerrera feroz o amazona salvaje que puede resultar muy sexy.
Nudo de Bondage “El sujetador”
Los japoneses, maestros de la sensualidad y el erotismo, llevan siglos practicando el shibari, una especie de bondage en el que la inmovilización de la parte sumisa no es una prioridad y en la que se persigue un objetivo mucho más estético. Una de sus prácticas más habituales es la de elaborar sujetadores de cuerda. Aprender a hacer uno de ellos nunca viene mal. Puede añadir un toque oriental a alguno de tus encuentros sexuales.
Nudo de Bondage “El Triángulo de las Bermudas”
La desnudez entera tiene su encanto, no lo negamos, pero tampoco podemos negar que, en ocasiones, unas…
Nudo de Bondage “El collar y la liga”
Este complemento que te vamos a enseñar a elaborar con cuerda y que no deja de ser una banda puede servir tanto de collar como de liga. Como collar, añadirá un punto inexcusablemente bondage a la sumisión que la pareja quiera representar en alguna escena BDSM. Como liga, tendrá una lectura completamente diferente, pero también cargada de erotismo.
Nudo de Bondage “Los guantes para la ópera”
¿Crees que tus manos y tus brazos son hermosos? Ése es un buen motivo para buscar la manera de realzar esa belleza. Te sugerimos una: una pieza de encaje realizada con cuerda, una especie de guante que te llegue hasta el codo creando sobre tu piel una textura que puede ser muy útil a la hora de masajear a tu pareja. Quizás no vayas a la ópera con ese maravilloso complemento, pero tu desnudez, adornada con se guante de cuerda, será tan elegante como una sesión de ópera.
Nudo de Bondage “El corsé de la sirena”
Un corsé realizado con cuerdas puede resultar muy excitante para un amante del bondage. Esta pieza de corsetería es relativamente fácil de elaborar. Se puede colocar sobre la ropa interior o sobre la piel desnuda. Indudablemente, esta segunda opción parece mucho más hot y sugerente. Imagina los pechos de tu pareja luciendo por encima de esa pieza de corsetería de cuerdas. ¿No te parecen más hermosos todavía?
Nudo de Bondage “La tabla”
Esta atadura es el paradigma de una atadura deliciosamente dominante. Piernas y muñecas quedan atadas a las patas y al respaldo de la silla, respectivamente. Con las piernas abiertas, los genitales quedan completamente expuestos a la caricia que la parte dominante del juego quiera realizar. Ésta es una de las ataduras estrellas del universo bondage.
Nudo de Bondage “La chica en el trono”
Esta atadura es el paradigma de una atadura deliciosamente dominante. Piernas y muñecas quedan atadas a las patas y al respaldo de la silla, respectivamente. Con las piernas abiertas, los genitales quedan completamente expuestos a la caricia que la parte dominante del juego quiera realizar. Ésta es una de las ataduras estrellas del universo bondage.
La escena sado: uso de cuerdas y navajas
La cuerda es, sin duda, una de las grandes aliadas de los juegos sadomasoquistas. El bondage como técnica de atadura no puede faltar en el BDSM. Otro de los instrumentos que tampoco pueden faltar en los juegos del sado es la navaja. La navaja proporciona muchas opciones de juego. Su efecto psicológico puede ser muy efectivo.
Nudo de Bondage “Atando una pierna a la silla”
Una simple silla de cocina puede hacer perfectamente las funciones de trono bondage. Para que nos sirva, a la silla sólo se le exigen dos requisitos: que tenga las patas rectas y que tenga un respaldo. Si la silla resulta muy incómoda para practicar vuestros juegos bondage, podéis utilizar unos cojines.
El látigo, las cuerdas y el pincho de bambú en la escena sado
Hay tres tipos de instrumentos que son muy apropiados a la hora de practicar el sado. El látigo es uno de los elementos imprescindibles del sadomasoquismo. Pero no hay que olvidar que cuerdas y pinchos de bambú también pueden ofrecer muchas posibilidades de utilización y juego.