Ganchos en la piel
En algún post anterior ya centramos nuestra mirada en la suspensión corporal bondage como una de las prácticas más habituales del BDSM. En otros llegamos a ver cómo artistas como Hikari Kesho o Nobuyoshi Araki habían realizado auténticas obras de arte BDSM fotografiando cuerpos de mujeres atadas y suspendidas.
En este post vamos a centrar nuestra atención en un tipo de suspensión muy particular: la que se realiza colgando a la persona de ganchos o piercings que están clavados o enchanchados a la carne. Sin duda, una práctica extrema del BDSM y que debe ser realizada con sumo cuidado.
Escoger cuidadosamente el material a utilizar para realizar la suspensión corporal con ganchos es fundamental para evitar posibles complicaciones de carácter infeccioso. El material más utilizado por los amantes de la body suspensión es el acero quirúrgico. Que los ganchos utilizados para la suspensión sean de ese material no elimina del riesgo de una infección. La correcta limpieza de dichos ganchos resultará, finalmente, fundamental para reducir ese riesgo a la mínima expresión. Junto a las infecciones, los desgarros en la piel o, en algunos casos, las náuseas, pueden ser algunos de los problemas que pueden derivarse de la práctica de la suspensión con ganchos.
Las suspensiones de ganchos pueden realizarse de diferente manera. La intensidad de la body suspensión deriva, para empezar, del número de ganchos. Cuantos menos ganchos se utilicen para realizar la suspensión más intensa será ésta. No hace falta señalar que la práctica de la suspensión con ganchos exige la dirección de la misma por parte de una persona cualificada y experta. La suspensión de ganchos no es una práctica BDSM para novatos. Conocer la técnica de cómo clavar los ganchos y dominar las leyes físicas que intervienen en la suspensión es fundamental para que la práctica de la body suspensión se realice con las suficientes garantías.
También lo es el saber el tipo de ganchos que se deben utilizar. En este sentido resulta fundamental el hecho de que, una vez suspendida la persona, el gancho tire de la piel por ambos lados de las perforaciones con la misma intensidad. Una intensidad muy superior en uno de los lados respecto al otro daría como resultado algo muy desagradable y doloroso: un desgarro. Por eso, a la hora de realizar suspensiones con ganchos, se suele escoger unos ganchos triangulares que reciben el nombre de Gilson Hooks.
Tipos de suspensión con ganchos
De entre los tipos de suspensión con ganchos existentes podemos destacar los siguientes:
- Suspensión de resurrección. Este tipo de body suspensión consiste en colgar a la persona boca arriba con los ganchos o piercings colocado en el tronco o el abdomen.
- Suspensión Superman. En este tipo de suspensión con ganchos, éstos se colocan en la espalda para que la persona quede colgada boca abajo como si se tratara del famoso superhéroe de DC Comics.
- Suspensión suicida. En este tipo de body suspensión con piercings, los ganchos se colocan en la parte alta de la espalda y en los hombros. Una vez situados ahí, la persona, suspendida, adopta la postura en que quedan los ahorcados.
- Suspensión de rodillas. Las rodillas son uno de los puntos en los que acostumbran a colocarse los ganchos que se utilizan para la práctica de la body suspensión con ganchos. Una vez colocados ahí, la persona es suspendida cabeza abajo.
- Suspensión del loto. Adoptando la famosa postura yogui del loto, la persona es suspendida utilizando ganchos que se colocan en tobillos, rodillas y espalda.
Se suele asegurar que, más allá de las posibles referencias a los faquires, a la cultura oriental o a las tribus originales americanas que se puedan ver en estas prácticas que podrían considerarse una evolución hacia el BDSM de la cultura del piercing, las suspensiones corporales con ganchos son prácticas que se derivan directamente de las performances realizadas por el artista chipriota-australiano Stelios Arcadiou (1946), más conocido como Stelarc. El buscar los límites del cuerpo y colocarlos más allá de lo que se encuentran era y es la motivación artística principal de Stelarc y es, también, la motivación de muchos practicantes actuales de la body suspensión con ganchos.
Existen tantas maneras de vivir la suspensión corporal con ganchos como personas que la practican. Hay personas que se suspenden apenas unos minutos, personas que se cuelgan un cuarto de hora y gente que está colgada de ganchos clavados a su piel durante más de una hora. Hay quien vive la experiencia como una diversión, como una manera de buscar la sensación de notar cómo un chorro de endorfinas inunda su cuerpo. Otras personas, por el contrario, viven este tipo de suspensión corporal como una forma de introspección. Colgadas del techo con cuerdas atadas a los ganchos que se clavan en su piel, estas personas se buscan a sí mismas y, gracias a esa experiencia casi catártica, profundizan en sus pensamientos y en sus sensaciones.
Para practicar la body suspensión con ganchos, al igual que para cualquier tipo de práctica BDSM, hay que estar sereno. Es decir: antes de una práctica de suspensión con ganchos no hay que consumir ni drogas ni alcohol. Tampoco es conveniente tomar medicinas vasodilatadoras antes de realizar una práctica de suspensión corporal con ganchos. Hay que limitar, en la medida de lo posible, toda posibilidad de sangrado excesivo.