Corsé de la sirena
¿De verdad no imaginabas que podía realizarse un corsé de cuerdas? ¿Y no te resulta excitante ver la imagen superior e imaginar así a tu pareja? Esta pieza de corsetería es bastante fácil de elaborar. Se puede colocar con ropa interior o sobre la piel desnuda, al gusto de cada cual. Esos bucles alrededor de la cintura son muy sugerentes. Con una cuerda de entre 15 y 20 metros, dependiendo de la cintura, tendrás bastante. El diámetro de esa cuerda rondará el centímetro.
Para realizar este tipo de atadura bondage, sigue los siguientes pasos:
- Dobla la cuerda por la mitad, enróllala alrededor de la cintura e introduce los extremos a través del lazo en la parte delantera. El bucle central debe quedar aproximadamente unos dos centímetros por debajo del ombligo. Apriétalo según te convenga, siempre con el aprobado de tu pareja.
- Envuelve la cuerda alrededor de la cintura, en la dirección opuesta a la anterior.
- Pasa los extremos de la cuerda a través del nuevo lazo y ajústalo según deseéis. Envolved de nuevo la cintura con la cuerda, en la dirección opuesta a la anterior.
- Repite el paso anterior cuatro o cinco veces más. Las cuerdas deben formar un diseño en la parte delantera del corsé.
- Asegúrate de que las cuerdas quedan planas y alineadas en la parte posterior. Cada vuelta debe quedar al ras de la anterior. La tensión debe mantenerse constante y, además, no hay que doblar las cuerdas.
- Da con la cuerda superior una vez más una vuelta alrededor de la cintura en la dirección opuesta a la última vuelta realizada.
- Atar un nudo cuadrado en la parte delantera para completar el corsé.
- Elimina las puntas uniformemente hasta el final. En el caso de que quede cuerda en los extremos y que esa cuerda sea lo suficientemente larga, puedes vincularlas a algún barrote o barandilla para jugar un poco a las nalgadas. Que el corsé, ya de por sí excitante, se convierta también en medio de sujeción hace que esta combinación resulte especialmente atrayente.
Realizado el nudo, ya tienes a tu pareja con un sugerente corsé de cuerda. La imagen, si eres un verdadero amante del bondage, puede resultarte muy excitante. Recréate en ella antes de iniciar vuestros juegos más íntimos.