Sangre y BDSM
Las prácticas más extremas de BDSM pueden incluir, de una manera u otra, algún tipo de juego con sangre. El juego con sangre marca una frontera muy clara entre los diferentes tipos de jugadores BDSM. Hay amantes que practican el BDSM pero que se niegan a traspasar ese punto en el que la sangre sale de su circuito normal de circulación (venas y arterias) para aflorar al exterior. Para otros, sin embargo, la sangre forma parte de sus fantasías. Para éstos, el BDSM sólo tiene sentido si la sangre aflora. Ahora bien, ¿cómo puede aflorar la sangre? Veamos los diferentes tipos de juegos con sangre existentes en el BDSM.
Abrasión
Aunque mucha gente no lo considere como tal, todo juego BDSM en el que se realice algún tipo de abrasión es un juego con sangre.
La abrasión puede realizarse con muchos tipos de instrumentos. Pueden servir las uñas (que adquieren protagonismo capital en los arañados), pero sobre todo pueden resultar útiles isntrumentos como un cepillo de pelo, un papel de lija, algún tipo de pincel, ralladores de metal, pinchos, tenedores, etc.
Arañazos
El arañazo es, en sentido estricto, una forma de abrasión. El arañazo, para serlo de verdad, debe hacer que la sangre aflore en mayor o menor medida a la superficie de la piel. Con unas buenas uñas (es decir, unas uñas que no estén recortadas en exceso o (¡horror!) mordidas, es relativamente sencillo realizar un arañazo.
Eso sí, al practicar un arañazo hay que tener en cuenta que hay que extremar las medidas higiénicas ya que, al arañar, restos de piel y sangre quedan siempre debajo de las uñas.
Sanguijuelas
La historia de la Medicina no podría entenderse sin la existencia de las sanguijuelas. Las sanguijuelas son unos gusanos anélidos (como las lombrices de tierra) hematófagos. Es decir: comen sangre. Colocada sobre el cuerpo, una sanguijuela corta la piel y, con la gran ventosa que tiene en su boca, extrae sangre de ese cuerpo hasta llenar su gran buche. Esto, que puede parecer asqueroso, fue práctica rutinaria médica desde hace 3.000 siglos. De hecho, en los siglos XVIII y XIX las sanguijuelas podían comprarse en las farmacias europeas. El desarrollo de la Medicina hizo que se dejaran de usar las sanguijuelas en las prácticas médicas, pero, desde hace unos años, la cirugía estética y reconstructiva ha recuperado el uso de estos animales.
En la práctica BDSM, el uso de las sanguijuelas en los juegos con sangre puede resultar muy llamativo e impactante. Las sanguijuelas suelen usarse para chupar la sangre de un muslo, un pecho, un glúteo o, incluso, una bolsa testicular.
Cortes
Cuando un no iniciado piensa en los juegos con sangre en el BDSM piensa, sin duda, en la realización de cortes que hagan aflorar la sangre. Los cortes, además, sirven para dejar una marca en la piel, lo que convierte a este tipo de juego con sangre en un juego muy apreciado por todos aquellos practicantes BDSM que, o bien quieren dejar una marca de propiedad en el cuerpo de su sumiso, o bien quieren llevar esa marca como señal de ser propiedad de alguien.
Los cortes pueden ser realizados con instrumentos muy diferentes. Cuchillos, bisturíes de hojas desechables, cuchillas de afeitar, navajas… sin duda la variedad puede ser muy amplia. En su momento ya dedicaremos un post especial a los juegos con sangre realizados con cuchillo o Knife Play, pero en este artículo vamos a dar cuatro consejos básicos para realizar cortes en los juegos con sangre BDSM.
El primer consejo es el de tener siempre a disposición productos desinfectantes y antisépticos y gasas esterilizadas. Hay que tener material aséptico para, en cualquier momento, poder actuar para detener un sangrado o limpiar una herida.
Otro consejo es del de tener a mano un poco de ceniza. La ceniza puede servir, en los juegos con sangre, para realizar algún tipo de escarificación. Si se desea realizar una escarificación llamativa habrá que realizar sucesivos cortes varias veces. Antes de volver a realizar un corte sobre un corte anterior para provocar una escarificación hay que asegurarse de que el corte anterior ha sanado.
Un tercer consejo, antes de ponerse a realizar cortes al realizar un juego con sangre BDSM, es el de practicar con una naranja y ensañar cortes más superficiales y más profundos. Estos últimos, lógicamente, sólo deberían realizarse cuando se posea una experiencia suficiente para saber dónde y de qué manera se puede realizar un corte. En cualquier caso, los primeros cortes, y aunque fueran superficiales, deberían realizarse con la asistencia de alguien que tuviera una contrastada experiencia en la práctica de juegos con sangre de este tipo.
Un cuarto consejo es intentar que las líneas de corte no se crucen. Si se cruzan dos líneas de corte es posible que cada una de ellas tenga una profundidad diferente a la otra.
Otros tipos de juegos con sangre
El uso de lancetas, agujas y piercings temporales son, también, otros tipos de prácticas que están englobadas en lo que se conoce como juegos con sangre. El vampirismo también se incluye entre dichas prácticas. No hace falta decir que no es bueno ingerir sangre. Aún así, si alguien lo hace, que lo haga en pequeñas cantidades. En mayores cantidades, y aunque apasione el sabor de la misma, el ingerir sangre puede provocar náuseas.
Me encantaria jugar con sangre mia sobre mi cuerpo