¿Cómo se coloca la sonda vesical?
En un post anterior te explicamos las utilidades de la sonda vesical, así como su tipología y formas de uso. En este post te vamos a explicar la técnica de la sonda vesical y las medidas de prevención que debes tener en cuenta para evitar que la colocación de una sonda vesical en un juego sadomasoquista se convierta en un problema de salud para alguno de los participantes en el juego.
Para introducir la sonda vesical en los juegos sadomasoquistas hay que dominar la técnica que nos permitirá usarla sin poner en riesgo la salud de la persona sumisa.
La primera medida a tener en cuenta al usar la sonda vesical en los juegos S/M es la de extremar la higiene. Tras un lavado higiénico de manos habrá que lavar convenientemente los genitales. Para ello se usará agua y jabón y alguna solución antiséptica que permita desinfectar los genitales y, especialmente, el meato urinario.
Una vez realizada la tarea anterior se tomarán unos guantes asépticos y se procederá a preparar la sonda vesical. Montar el sistema de la bolsa colectora, cargar la jeringa con la cantidad de agua adecuada para el balón de la sonda que utilicemos, comprobar el buen funcionamiento de éste y aplicar el lubricante a la sonda son las fases que deben realizarse para completar la preparación de la sonda vesical.
Una vez finalizada la tarea de preparación de la sonda vesical se procederá a colocar a la persona que hay que sondar tumbada boca arriba y con las piernas abiertas. Si esa persona es mujer, se colocará con las rodillas flexionadas y separadas, se separarán los labios mayores de la vulva y se buscará el meato urinario. Identificado y lubricada la sonda vesical, se introducirá ésta hasta que empiece a fluir la orina. Una vez la orina empiece a fluir, se introducirá la sonda 2 ó 3 centímetros más y, retirando la guía de introducción de la sonda, inflaremos el balón de auto-retención con agua destilada para fijarlo. En esta tarea de inflado del balón no debe utilizarse suero fisiológico. El suero posee sodio y éste puede provocar la rotura del balón. Para inflar a éste deben utilizarse los mililitros de agua destilada recomendados por el fabricante de la sonda vesical para asegurarse la efectividad del mismo.
Si la persona a sondar es hombre, se colocará a éste con las piernas estiradas. Sujetando el pene, se retrotraerá el prepucio y se introducirá la sonda vesical, previamente lubricada, en el meato urinario y hasta que se encuentre un tope. Al encontrar ese tope, se inclinará el pene unos 45º. Esta inclinación favorecerá el paso de la uretra prostática y el acceso a la vejiga. Una vez llegada la sonda vesical a la vejiga urinaria, la orina comenzará a fluir. En ese momento, y como en el caso de la mujer, la sonda se introducirá unos 2 o 3 centímetros más. Tras ello, se retirará la guía y se inflará el balón de auto-retención con el agua destilada.
Una vez realizado todo esto, se deberá conectar la sonda vesical a la bolsa colectora.
Prevenciones para colocar una sonda vesical
Al colocar la sonda vesical hay que vigilar que no se origine alguno de los siguientes problemas:
- Que se cree una falsa vía debida al traumatismo de la mucosa uretral. Para evitar este contratiempo hay que asegurarse de que la sonda uretral entra con suavidad.
- Que se obstruya la sonda por coágulos, moco, sedimentos de la orina o, en su caso, por acodamiento de la sonda.
- Que se produzca una infección urinaria ascendente por una ascensión de bacterias a través de la sonda.
- Que se produzca una pequeña hematuria (presencia de sangre en la orina) posterior al sondaje debido a alguna pequeña herida que se haya producido al introducir la sonda.
Otros de los cuidados que hay que tener a la hora de utilizar una sonda vesical son los siguientes:
- Mantener la bolsa colectora siempre a un nivel inferior al de la vejiga. Esto impedirá que se produzca un reflujo que lleve de nuevo la orina hacia la vejiga.
- No introducir la sonda en la vagina. Si se hiciera, la sonda vesical debe ser rechazada y sustituida por otra nueva.
- La sonda vesical será también rechazada y sustituida si en cualquier momento de su uso roza una superficie no esterilizada.
- La bolsa colectora debe ser vaciada cuando el nivel de orina alcance los dos tercios de capacidad de aquélla.
Teniendo en cuenta todos estos consejos puedes aventurarte a introducir la sonda vesical entre tus instrumentos para practicar el sado medical. En cualquier caso, y como siempre recomendamos en este tipo de juegos, te aconsejamos contar con la colaboración de alguien que, con conocimientos de enfermería, te enseñe adecuadamente, y con demostración práctica, la técnica de la sonda vesical. Seguro que, una vez dominada, encuentras escenas muy apropiadas para su aplicación entre tus juegos sadomasoquistas.
